A la vuelta de las vacaciones vamos repasando algunos de los contenidos que trabajamos a lo largo del curso pasado, cuando teníamos 3 años.
Como todos recordaréis, uno de los proyectos que hicimos fue el de Las flores, todo un éxito.
Cada día jugábamos con nuestra baraja de cartas, de esta forma íbamos conociendo cómo eran algunas flores, su nombre y su grafía correspondiente en letra mayúscula.
Esta baraja consta de 16 cartas y en cada una de ellas aparece la imagen de una flor, por detrás también está escrito su nombre en letra mayúscula y minúscula.
Por otro lado hay otras 16 tarjetas con el nombre de las flores: margarita, rosa, clavel, centaura, girasol, nenúfar, lirio, amapola, dedalera, violeta, tulipán, chumbera, hinojo, poleo, orquídea y lavanda.
Era un juego muy deseado y esperado por todos, tanto que, durante las últimas semanas, lo hacíamos a diario porque ellos así lo pedían.
Una forma muy interesante de aproximarse al lenguaje escrito...
Al principio yo les mostraba sólo las tarjetas de las flores para que ellos fueran aprendiendo sus nombres (tengo que decir que algunas no las conocía ni siquiera yo).
Cada día les iba mostrando una flor nueva y ellos tenían que ir diciendo el nombre de las que ya habíamos visto hasta ese momento.
Por fin, y no sin muchos días de trabajo, consiguieron reconocer las 16 flores de la baraja.
Ahora quedaba la parte más difícil: hacer lo mismo con las grafías correspondientes, y esa tarea era mucho más complicada... ¡pero no imposible!
Así que, para sorpresa de todos, estaban tan entusiasmados con el juego que, poco a poco, fueron reconociendo todas y cada una de las grafías correspondientes a las 16 flores de la baraja.
Una vez conseguida la parte más difícil, por fin pudimos comenzar a jugar de un montón de formas diferentes, todas muy motivadoras y didácticas.
En un primer momento, yo decía en voz alta el nombre de una flor y ellos, con su baraja en la mano, tenían que ir buscando la carta en la que aparecía la imagen de la flor que yo había nombrado.
Si nos queréis ver, poned los altavoces y haced doble click sobre la flechita:
Después de muchos días trabajando con la baraja de flores y sus grafías correspondientes, yo les enseñaba una tarjeta con el nombre en mayúscula de la flor (sin leerla en voz alta) y ellos tenían que buscar la imagen pertinente.
¡Era estupendo observar la cara de emoción que ponían cuando conseguían encontrarla!
Algunas veces dibujaban en folios, (ellos mismos los separaban por la mitad) algunas de estas flores con su escritura correspondiente. En ocasiones lo hacían como sugerencia mía y otras muchas surgía de ellos de manera espontánea como una actividad más dentro de su tiempo libre.
Y es que, ¡nuestra baraja de cartas ha dado muchísimo juego!
Otro día os lo mostraremos...
Si nos queréis ver, haced doble click sobre la flechita:
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