¿Y ESTO QUÉ ES? 3ª PARTE

Por fin llega el momento de desvelar el misterio.

Víctor: Seguro que esta carta viene de un castillo.
Manu: Pero ahora no estamos en la vida de los castillos.
Elías: Sí, lo ha podido traer un bufón y dejarlo ahí. Cuando yo vaya mañana a un castillo, voy a averiguar si hay un bufón o no.
Manu: Ya verás como no hay.
Víctor: Yo una vez vi a un bufón en un castillo que fui, y un escudo con una espada.
Yo: Es verdad, nos lo contó en el libro viajero, ¿os acordáis?
Víctor: Y el bufón estaba riendo a la gente.
Manu: Pero el bufón ese está lejos y se tiene que quedar allí haciendo risa a la gente en las fiestas, y a los que comen, y a todos los que están allí...

Comenzamos a leer en grupo. Yo les ayudo en las palabras más difíciles.
Sólo un pequeño grupito es capaz de leerlo casi sin ayuda, pero los demás le siguen y participan en las palabras más fáciles. ¡Seguro que algo se les va quedando!
No hay nada como tener verdadero interés y necesidad de leer para intentarlo.
Continúa leyendo para saber más.


Yo: ¿De quién será entonces esta carta?
Víctor: De un rey.
Andrea: De una princesa.
Gina: Del caballero triste.
Marina: Yo creo que es de la Edad Media.
Elías: O de un bufón. Y el papel está quemado.
Carlos: Del caballero.
Yo: ¿Y por qué ha traído la carta?
Adam: Para que vayamos a ayudarle.
Yo: Pero, ¿adónde hay que ir?
Víctor: Pues al castillo.
Andrea: A la torre, que es donde está encerrada.
Víctor: ¡Vamos ahora! ¿Por qué no vamos ahora?

Andrea: No, que hay una bruja malvada, chiquillo, ¡y yo no puedo ir!
Manu: Si hay una bruja nos convierte en ratas.
Víctor: Pero, ¿podemos ir al castillo ahora, seño?
Mª Alexandra: Sí, podemos ir ahora porque yo sé mucho karate para matar a la bruja que es muy mala.
Jose: Pues sí, porque Mª Alexandra y yo sabemos mucho karate.
Yo: ¿Estáis diciendo que queréis ir al castillo?
Víctor: Sí, podíamos ir ahora.
Rubén: Yo no porque me da miedo. Y mi madre dice que si me da miedo no tengo que ir.
Yo: Pero sabemos que es un disfraz, así que no nos tiene que dar miedo.
Nicolás: No, tenemos que reirnos porque es un disfraz.
Jose: Tenemos que ir en un Ferrari, que corre mucho y no se rompe porque no es de cristal.
Elías: No, son de metal.
Rafa: O en autobús.
Manu: ¿Y cómo vamos a abrir la puerta de la torre?
Víctor: Con las llaves que tenemos, las que trajo Rafa.
Jose: En los castillos hay un puente levadizo que se abre cuando son los buenos y cuando son los malos no. ¡Pero no tiene agujerito de la llave!
Manu: Pues la podemos abrir empujando con un tronco como en el libro.
Víctor: No, porque además el castillo está en una gran colina y tenemos que subir mucho con mucha cuesta.
Yo: ¿Pero a qué castillo hay que ir?
Ismael: ¡Al de España!
Víctor: Pero la seño nos ha enseñado en el ordenador que hay muchos castillos y con muchos nombres.
Marina: Pero no sabemos el camino cuál es.
Andrea: Pues si un día nos encontramos a la bruja le decimos: "¿Nos prestas las llaves, por favor? Y que nos diga dónde está el castillo".
Yo: ¿Y crees que nos las dará?
Andrea: Si la perseguimos y le decimos por favor, ella nos lo dice.
Rafa: No, porque se va a creer que le vamos a abrir a la princesa.
Jose: Pues aparcamos el Ferrari allí abajo y escuchamos con atención el sonido de la bruja hablando y así sabemos dónde está.

Son tantas las ideas que van surgiendo, que comienzan a hablar todos a la vez, sin respetar ningún turno.
Hablan tanto que, aunque quisiera, no me daría tiempo a escribir lo que dicen.
Necesitamos un respiro y relajarnos un poco, son muchas las emociones.

Así podremos seguir pensando en lo que vamos a hacer...